martes, 5 de julio de 2016

LA CONSCIENCIA DE LA SIEMBRA a cerca de la luna nueva


La siembra de intenciones sin consciencia del proceso y la energía que presenta es un peligro para nuestro equilibrio energético y emocional. Te has preguntado ¿de dónde vienen las semillas?


Como Bruja responsable que he elegido ser, me detengo a reflexionar con ustedes sobre el boom de rituales y siembra de deseos en luna nueva. Para todas quienes lo practican, -incluída yo misma- les pido recordar, mirar al pasado para traer todas esas intenciones que durante todo el año o los años hemos sembrado. ¿Cuántas de ellas se han convertido en fruto? ¿Cuántas de ellas hemos verdaderamente sostenido en el tiempo?  ¿Cuánto compromiso entregamos en cuestión de tiempo, energía y cuidado a esas intenciones? ¿Cuántos de estos deseos realmente estamos listas para que se hagan realidad?



Las invito hoy a mirar el ciclo de la vida desde un panorama más grande, una óptica que incluya todos los procesos del tiempo. La lunita nueva es justamente el portal donde la vida y la muerte se cruzan, se encuentran. Las semillas son el resultado de ello. Sólo las flores que se dejan marchitar sin ser arrancadas pueden dar semillas luego. El fruto es sólo resultado de un proceso de atenta espera, paciente cuidado y amor a todo el proceso de la planta, no sólo a una etapa o ciclo en concreto.

Las semillas representan a la vez pasado y futuro. Pasado porque son resultado del proceso vida-muerte-vida de la planta, pasado también porque contienen la información de todas las plantas anteriores de las que viene esta ya que la semilla guarda toda la memoria. Una semilla es también futuro, representa la posibilidad de crecer y de desarrollarse como sus ancestras siempre y cuando las condiciones de tierra, sol, agua y aire estén disponibles. Recordemos que hay plantas que crecen bajo de la tierra, otras siguiendo el movimiento del sol, otras prefieren el fresco de la sombra.

Cuando la flor de la lavanda de convierte en semilla


La obsesión por sembrar, por desear, por diseñar el futuro nos hace perder de vista un detalle. La semilla puede guardarse y conservarse por un buen tiempo. Es decir no porque la semilla esté lista significa que haya que sembrarla ahora. Nosotras mujeres medicina somos las guardianas de la vida, entonces somos las guardianas de al semilla, y parte de esa responsabilidad es administrarlas. No podemos desperdiciarlas sólo porque queremos sembrar, sembrar a lo loco desestabiliza el ambiente y la energía de la tierra.

Quiero pasar entonces de la metáfora de las plantas a las consecuencias en nuestra vida cotidiana. Qué pasa cuando sembramos muchas intenciones? Pasa que nos alejamos de asumir las responsabilidades de nuestras acciones. Nos embargamos en viajes de fantasía sobre cómo quisiera que sea nuestra vida y dejamos de conectarnos con nuestro alrededor. El presente, nuestros vínculos, nuestros proyectos. Así como al ser sembrada una semilla afecta la vida y el equilibrio de toda la huerta, así mismo nuestros comportamientos afectan a todo nuestro entramado.

Cada intención sembrada genera una energía a la cual luego hay que sostener con el tiempo, con los cambios que necesito hacer yo en mi vida cotidiana para que ese deseo pueda anclarse.

                         


El Universo escucha, no pidas por pedir, valora lo que tienes, aprecia todo lo que estás cosechando de tus relaciones y sueños anteriores, ten paciencia para recolectar los frutos, esa es la fuerza y el compost que hará crecer nuevas y sanas semillas que perdurarán en tu vida.



Si quieres escuchar más sobre esta reflexión sobre la luna nueva y lo que aprendí en mi huerto ve aquí:

http://www.spreaker.com/user/mariafe/la-obsesion-por-sembrar-sobre-la-luna-nu

con amor:

MaríaFe